NO SOMOS IRROMPIBLES
Los cristales pueden quebrarse.
A veces basta un leve golpe de abanico.
Las telas suelen desgarrarse al contacto de una diminuta astilla.
Se rasgan los papeles...
Se rompen los plásticos...
Se rajan las maderas...
Hasta las paredes se agrietan, tan firmes y sólidas que parecen.
¿Y nosotros?
Ah!...Nosotros tampoco somos irrompibles.
Nuestros huesos corren el riesgo de fracturarse, nuestra piel herirse...
También nuestro corazón, aunque siga funcionando como un reloj suizo y el médico nos asegure que estamos sanos.
¡CUIDADO! ¡ FRÁGIL ! El corazón se daña muy fácilmente.
Cuando oye un "no" redondo o un "sí" desganado, una especie de "nnnnsí"
y merecía un tintineante "¡Sí!"...
Cuando lo engañan...
Cuando encuentra candados donde debía encontrar puertas abiertas.
Cuando es una rueda que gira solitaria día tras día...noche tras noche...
Cuando...
Entonces, siente tirones desde arriba, por adelante, desde abajo, por detrás...o es un potrillito huérfano galopando dentro del pecho.
¿Se arruga?
¿Se encoge?
¿Se estira?
No.
Late lastimado.
¿Y cómo se cura?
Solamente el amor de otro corazón alivia sus heridas.
Solamente el amor de otro corazón las cicatriza!!!!!!!!.
Elsa Bonermann
-------------------------------------------------
Mi reflexión de este texto es que...
Los avatares de la vida a veces van forjando corazones duros y fríos que no permite la entrada de la luz de el amor. Quizás por ese o esos amores que desilusionaron...
... y no lo veo sólo asociado a ese amor de pareja si no mas allá, amigos, padres, hermanos, quienes han logrado entrar a ese delicado rincón de la confianza y la entrega.
Pero un corazón duro pierde la magia de la vida y se convierte en algo tan insensible que con facilidad rompe los corazones que pasan por su vida.
La inteligencia del amor esta en saber dar y recibir, saber cuidarse de no ilusionarse y esperar algo a cambio sino sólo dar por el placer de amar y saber que los otros corazones requieren de cuidado. Una palabra o un gesto sin consciencia de su efecto puede dañarlos quizás para toda la vida.
Charlaba con un amigo de lo fácil que es dañar a quienes más queremos y tenemos cerca, claro conoces todas sus debilidades y sabes donde más dolerán tus acciones.
Espero que este mensaje te ayude a ser más cauto en tus actos, a mi me ha recordado que debo cuidar no solo mi corazón sino que también los de mis seres queridos.
Te deseo una linda semana con muchas flores de amor en tu alma.
Fraternalemnte,
Jenny Bravo
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario